Selección de productos con un regalo
Volver a los orígenes de Damilano significa remontarse al final del siglo XIX, donde se fusionan conocimientos arraigados y la exclusividad de un territorio único en el mundo. Aunque no es posible hacer un vino memorable sin los conocimientos adecuados, también es cierto que Damilano cuenta con cru de gran importancia como Cannubi, Cerequio y Brunate, capaces de expresar al máximo las uvas Nebbiolo.
De estas premisas nacen variantes ejemplares como el Barolo Cannubi, un vino envolvente y con cuerpo, con gran evolución, o el Barolo Lecinquevigne que destaca por su suavidad fascinante y persistencia. También hay una intensa concentración en el Barolo Brunate, mientras que en el Barolo Cerequio predomina la profundidad tánica y la estructura, para ofrecer notas de tabaco, alquitrán y trufa. También vale la pena probar el Nebbiolo Marghe, fresco y agradablemente concentrado, y el Langhe Arneis, delicado y con notas de frutas frescas. Para el placer del paladar y por la maestría, estamos ante una elección que recompensa al menos dos veces.
